PRIMER CONGRESO DE LÍDERES MISIONEROS
Según cifras oficiales, Bogotá tiene una población de 7.776.845 habitantes, de los cuales sólo el 0.45% son adventistas, pese a los muchos esfuerzos que ha desarrollado la Iglesia Adventista en Bogotá. El desafío es grande, y la tarea es ardua, sin embargo estamos confiados en que el Señor es quien nos guía. Precisamente esa frase la pudieron comprobar los 1.180 líderes que asistieron el pasado 1 de marzo al lanzamiento del primer congreso de líderes misioneros de Bogotá que llevaba como título «Pentecostés. Cada hogar un altar», y que se llevó a cabo en el auditorio del Cubo de Colsubsidio en la capital colombiana.
El Pastor Henry Beltrán, Presidente de la Asociación del Alto Magdalena, tuvo la apertura del congreso con el seminario «Cada hogar un altar a Jehová», en el que trazó importantes desafíos para la nuestro campo. «Contrario a lo que muchos dicen sobre salir de las ciudades, yo pienso que este es el momento de estar en las grandes ciudades para predicar. Aún nos falta el 99.55% de población que no sabe del mensaje de salvación, y tenemos que aprovechar que estamos en medio de ellos para hacerlo» Dijo el Pr. Beltrán durante su meditación.
Según dicen los expertos, se espera que para el 2020 el 70% de la población mundial estará en las urbes, eso quiere decir que el terreno donde debemos ganar almas para Jesús está en el ambiente de cada uno de nosotros. En nuestra oficina, en nuestra empresa, en nuestro barrio o conjunto residencial.
«Recordemos que la Iglesia primitiva fue una Iglesia que conquistó millones de corazones a través de la consagración de sus miembros, permitiendo que el Espíritu Santo estuviese con ellos, y hubiese un Pentecostés. Si cada uno de nosotros consagramos nuestro hogar y nuestros hijos a Cristo, cosas grandes sucederán en nuestras vidas, y nuestra familia será un centro de influencia entre nuestros vecinos , amigos y familiares que aún no han aceptado el mensaje de salvación». Dijo el Pr. Fredy Martínez, Deptal de Evangelismo, Min. Personales y Jóvenes de la Asociación del Alto Magdalena.
Cabe resaltar que contamos con el apoyo de la Unión Colombiana del Sur en cabeza del pastor Eliseo Bustamante, quien fue el encargado de tomar el llamado a los pastores, y miembros del cuerpo ministerial, para que las casas de nuestros líderes se conviertan en un altar a nuestro Dios. “Estamos muy contentos de estar aquí, y de ver que ciertamente el plan que se ha puesto en marcha, es el plan que Dios ha trazado para que cada día seamos más adventistas en la ciudad de Bogotá”. Anotó el Pr. Bustamante, Presidente de la U.C.S.
1.180 Líderes comprometidos
El punto cumbre del evento se dio al momento del llamado. Cada líder de nuestra Iglesia subió a plataforma a recibir un pin que lo identificaba como líder misionero activo de nuestro campo, y también se comprometió frente a Dios y su comunidad, de dedicar su hogar y su familia a Cristo. Además recibió un kit misionero que incluía un manual de Grupo Pequeño 2014, donde cada semana lleva un tema distinto para tratar en el grupo pequeño, un juego de DVD que contiene temas de familia, y temas doctrinales, un cursillo llamado cómo conocer a Jesús, y la Fe de Jesús.
Todos estos materiales se irán desarrollando durante el año de acuerdo con el plan estratégico de salvación de personas, que el Depto. de Evangelismo ha planteado para este 2014. Lo primordial, es que haciendo de nuestro hogar un altar a Jehová, la Iglesia entera se movilice en oración y consagración para que se pueda dar el Pentecostés, y el Espíritu Santo haga grandes cosas en nuestras vidas, y en la vida de las personas que nos rodean.
El trabajo es arduo, y hasta ahora estamos iniciando. En cada Iglesia estaremos motivando a nuestro pueblo cada 30 minutos motivando a que mujeres, niños, jóvenes y hombres estén vinculados en esta misión. «Hermanos míos, como su servidor los insto a que cada noche imploremos en familia por el poder del Espíritu Santo. Cuando este descienda, todos nosotros estaremos testificando, y así proclamaremos el mensaje para que la segunda venida de Cristo sea una realidad». Finalizó el Pr. Martínez.